Buenos Aires, 6 enero (PR/20) — El humo provocado por los incendios en Australia llegó a la Argentina, informó este lunes el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), y aseguró que no afecta a la salud ni perjudicará la normalidad de los vuelos.

“Si bien no es común” que llegue el humo cada vez que hay un incendio, “no es la primera vez que sucede”, explicó Cindy Fernández, meteoróloga del SMN.

“Ya ingresó humo semanas atrás, cerca del 6 de noviembre. Es un humo disperso que se puede divisar”, agregó Fernández en declaraciones a Télam.

La meteoróloga afirmó que la presencia de humo sobre el territorio nacional no afecta a la salud ni complicará la normalidad de los vuelos.

“El único fenómeno que se puede divisar con la presencia de humo es observar una coloración distinta en el cielo, ya que se atenúa la luminosidad del sol y se puede observar el cielo más gris”, aseguró, y agregó que “durante el atardecer se ve el cielo más rojizo“.

También explicó que el humo viajó desde Australia “con presencias de aire de la atmósfera”. “En el viaje el humo se va dispersando en partículas. Una parte de estas partículas se va precipitando en forma de lluvia”, señaló.

Nueva Zelanda 

El humo provocado por los incendios forestales en Australia perjudicaba también a Nueva Zelanda, en tanto los expertos advirtieron que las nubes de hollín podrían afectar los glaciares australes.
“El humo de los incendios forestales se extiende a través del mar de Tasmania, impulsado por los vientos. Es probable que coloree los cielos”, señaló un reporte en redes sociales del Servicio Meteorológico de Nueva Zelanda.
De acuerdo con el sitio web de The Weekend Australian, “los glaciares australes en Nueva Zelanda se enfrentan a una nueva amenaza, que son las nubes de hollín naranja de los incendios forestales en Australia”.
En los últimos días, un cielo anaranjado se apreciaba en algunas partes del territorio australiano, donde una veintena de personas y casi 500 millones de animales han muerto a causa de los incontrolables incendios.
Los expertos dijeron que “la ceniza que cayó sobre la nieve en Nueva Zelanda la semana pasada desde 1.900 kilómetros de distancia a través del Mar de Tasmania podría absorber más calor y derretir la nieve más rápido este verano, ya que un desastre climático acelera a otro”.
Por su parte, la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, aseguró que “ha sido devastador mirar desde lejos; sólo puedo imaginar lo que se siente al experimentarlo directamente”.
Ardern dijo que la próxima semana Nueva Zelanda enviará a Australia otro equipo de 22 bomberos y apoyo logístico. “Hemos estado trabajando junto con nuestros homólogos australianos desde octubre”, indicó.
Las autoridades declararon estado de emergencia en las zonas afectadas por los incendios, debido a que al menos 140 focos de fuego continúan ardiendo.
“He estado en contacto con el primer ministro australiano nuevamente esta semana para compartir nuestro apoyo y ofrecer todo lo que podamos para ayudar. Australia nos apoyó durante algunos momentos horribles en 2019 y estamos aquí para hacer lo mismo”, puntualizó.

Fuentes: Clarín y Agencia NA

Primicias Rurales