Buenos Aires, 24 octubre (PR/22) — Desde el inicio del año climático 2022/2023, en el pasado mes de Julio, la mayoría de los medios vienen insistiendo en que el evento doble de “La Niña”, que se extendió sin interrupción durante las temporadas 2020/2021 y 2021/2022, se prolongará durante la temporada 2022/23, produciendo un impacto catastrófico sobre la producción agrícola de la mayor parte del Cono Sur.

Contrariamente, los informes difundidos por las instituciones más prestigiosas, permite inferir que, aún las más pesimistas, como es el caso de la NOAA estadounidense, no prevén un tercer episodio de “La Niña”, sino una transición hacia una fase de tipo “Neutral Cálido”, al mismo tiempo que pronostican una gradual reducción de la actividad de los vientos polares:

Por lo tanto, la temporada 2022/2023 debe verse como un proceso de transición entre las condiciones severas causadas por “La Niña” y los vientos polares en las temporadas 2020/2021 y 2021/2022, y las condiciones más benignas, tal vez tipo “El Niño”, que pueden esperarse en la temporada 2023/2024, causando efectos climáticos diferenciales, según la Región que se
considere.

Asimismo, puede señalarse que la tendencia positiva, observada recientemente por los principales indicadores climáticos, hace suponer que el proceso de normalización podría cumplirse antes de lo expuesto en este informe.

No obstante, a lo largo del proceso de transición en marcha, el sistema climático continuará mostrando perturbaciones de entidad, haciendo necesario un manejo riguroso y el uso de la tecnología disponible.

Lo expuesto indica que la temporada 2022/2023 debe verse como un proceso de transición entre las condiciones severas causadas por “La Niña” y los vientos polares en las temporadas 2020/2021 y 2021/2022, y las condiciones más benignas, tal vez tipo “El Niño”, que pueden esperarse en la temporada 2023/2024, causando efectos climáticos diferenciales, según la Región que se considere.

ING. AGR. EDUARDO M. SIERRA
ESPECIALISTA EN AGROCLIMATOLOGÍA

 

Primicias Rurales

Fuente: Bolsa de Cereales de Buenos Aires