Buenos Aires, 5 diciembre (PR/19) — El mercado local de granos registró este jueves una menor actividad comercial en el recinto de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), con bajas de precios abiertos por compras.
La actividad deprimida se atribuyó a la cautela de los operadores al conocerse que la empresa Vicentín, que es habitual compradora de granos en la BCR, decidió reestructurar su deuda por estrés financiero.
Los segmentos de soja que destacaron en la jornada fueron los de entrega diferida de la presente campaña, 2018-2019 y el precio abierto de compra con descarga inmediata fue de US$ 245 la tonelada, cinco dólares por debajo de la rueda previa.
En cuanto a la soja con descarga en el mes de enero 2020, el mejor precio de compra fue de US$ 251/t, con febrero negociado en los US$ 252, la tonelada, dos segmentos que mayor volumen de negocios acapararon en la jornada.
Mientras que hubo una caída en el valor de compra por girasol, tanto para la descarga inmediata como para la posición
enero de 2020, con el precio de compra en los US$ 240 la tonelada, US$ 5/t por debajo del valor abierto del día miércoles.
En tanto, la actividad comercial por trigo mermó, con la mayoría de los negocios focalizados en entregas próximas,
aunque también se registraron operaciones para la descarga en marzo de 2020.
El precio abierto de compra por mercadería con descarga inmediata estuvo en los US$ 160 la tonelada, aunque por diferir la entrega hasta el 10 del corriente se podían conseguir US$ 165/t.
Por trigo condición contractual, sin descarga pactada, el valor abierto de compra se situó en los US$ 170/t.
Para la descarga en marzo, el precio abierto de compra fue de US$ 172/t, aún así, en el registro oficial de operaciones, hubo operaciones de compra-venta por US$ 180 la tonelada.
El mejor valor abierto de compra por maíz con descarga se ubicó en los US$ 140 la tonelada y de la campaña próxima, 2019-2020 para la descarga entre el 15 de febrero y el 15 de marzo se ubicó en los US$ 139/t, ligeramente por debajo de la jornada previa.
Por su parte, el mercado de Chicago cerró con saldo dispar, anotando una suba para la soja y con bajas para el maíz y el trigo.
La débil demanda externa de los cereales estadounidenses, con un informe de ventas de exportación del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) por debajo de las expectativas de los analistas, deprimió al mercado de trigo y maíz.
Operaciones de compras de oportunidad, junto con señales de que la demanda del suministro estadounidense en los mercados externos generaron un repunte, alentaron al precio de la soja.

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