Se pueden realizar visitas a centros comerciales, museos y actividades al aire libre, gastronomía y excursiones. Estas son algunas de las ofertas.
Buenos Aires, miércoles 21 mayo (PR/25) — Las distancias entre ciudades argentinas son extensas y llevan tiempo recorrerlas, por lo que, planificar una jornada en cada una de ellas para realizar un viaje fugaz de horas o, incluso pocos días puede resultar provechoso y placentero para optimizar los momentos permitiendo visitar los sitios más turísticos de cada lugar.
En tiempos donde el reloj apremia y las escapadas son cada vez más cortas, saber qué hacer en un destino en apenas uno, dos o tres días se volvió fundamental. Ya sea en feriados o fines de semana largos, ciudades como Rosario, Córdoba o Mendoza ofrecen propuestas intensas para descubrir su identidad en poco tiempo y aprovechar al máximo la estadía.
Saber moverse en la ciudad es una aventura, ya que, organizar actividades y recorridos, buscar alojamiento y restaurantes para disfrutar de la gastronomía del lugar es parte de la misma. Y puntualmente salir a cenar más que una regla natural a cumplir, es una experiencia sensorial que invita a conocer más de la cultura del lugar.
Ordenadas por kilómetros más cercanos al Obelisco, cada una con sus particulares y ofertas culturales, gastronómicas y turísticas, estas son tres de las ciudades más importantes del país para conocer y vivirlas intensamente.
Rosario
A 300 km del Obelisco, demanda tres horas de viaje en auto y cuatro en micro, aproximadamente.
¿Qué hacer en la Cuna de la Bandera Nacional en 24 horas?
Sin dudas que salir del hotel o departamento para conocer el Monumento a la Bandera, símbolo absoluto de la ciudad es una correcta decisión, ya que, además, se aprovecha para caminar por la costanera, visitar el Parque España y almorzar en el histórico barrio Pichincha, con alma bohemia. Por la tarde, se puede disfrutar del arte en el Museo Castagnino y cerrar el día con un atardecer en la rambla Cataluña completa el recorrido.
Actividades para 48 horas en la Ciudad
Si la estadía es de dos días, sumar una mañana en la Isla El Espinillo con paseo en lancha y picnic es ideal, principalmente en las temporadas cálidas, pero para conocer o añadir la pesca a la excursión es otra buena opción. También, está disponible una visita al Mercado del Patio para probar productos regionales y, a la noche, degustar los platos autóctonos y tradicionales en una cena gourmet en el boulevard Oroño y un espectáculo en el Teatro El Círculo.
Tres días o 72 horas a orillas del Paraná
A lo antes dicho, con la disponibilidad de tres días para recorrer, se puede incluir una escapada al Acuario del Río Paraná o al Bioparque La Granja y, para quienes gustan de la historia, pueden alejarse, por un rato, de la ciudad para llegar hasta el Complejo Museológico del Pino de San Lorenzo, en la localidad de mismo nombre distante media hora del centro de Rosario en dirección norte para conocer la historia del Padre de la Patria, Don José de San Martín.
Luego, de regreso a la ciudad, disfrutar de una merienda en el mítico Bar El Cairo y pasear por la peatonal es otro de los paseos bien rosarinos que se pueden hacer para cerrar tres días con una cena a base de pescado de río a modo de despedida.
Córdoba
“La Docta” está a 715 kilómetros de la Calle Corrientes y, se puede arribar en una hora de vuelo, ocho horas en auto y poca más de 10 en micro.
24 horas en las sierras
Es la segunda ciudad del país y tiene de todo para hacer combinando vida con ritmo capitalino y naturaleza a pocos kilómetros. Por eso, explorar el centro histórico visitando la Manzana Jesuítica, la Catedral y el Cabildo, con almuerzo en Güemes, un barrio con bares, ferias y murales es un itinerario bien cargado y rico culturalmente para un día en Córdoba.
48 horas conociendo la capital de la provincia mediterránea
Tras el descanso con vista a las sierras o la ciudad, al segundo día en Córdoba puede agregarse una visita a la Ciudad Universitaria y al Parque Sarmiento en la mañana y, por la tarde, recorrer museos como el Emilio Caraffa. Y, en la noche, degustar la gastronomía cordobesa con una cena con vista a Nueva Córdoba para enamorarse de la urbe y querer volver por más.
72 horas entre la naturaleza
En un viaje de tres días, el tiempo bien repartido da para hacer una escapada a las Sierras Chicas de Villa Allende, Mendiolaza o La Cumbre. Allí, se podrá aprovechar a realizar caminatas, conocer el arte local y las casonas de época, como así también disfrutar del aire libre y un desayuno o merienda en las casas de té entre montañas.
Mendoza
A 1.050 km del Rosedal de la Ciudad, distante 90´ en avión, 13 horas en auto y poco más de 14 en micro, está la “puerta” a la majestuosa Cordillera de Los Andes.
24 horas en la Capital Nacional del vino
Mendoza es una las provincias más lindas y visitadas del país por su historia y su intrínseca relación con la producción y cultivo de la vid. Un día en ella puede ser poco, pero, se puede disfrutar mucho. Caminar por el Parque General San Martín y subir al Cerro de la Gloria es indiscutible. En la altura, la cima espera con el relato de la historia en detalle del cruce de Los Andes y vistas increíbles a las montañas. Al bajar, es recomendable almorzar con vino en la zona de la calle Arístides, la “Calle Corrientes” de Mendoza con mucha movida de bares, sobre todo por la noche, y restaurantes y un vaivén de gente caminándola. Y por la tarde, visitar una bodega urbana o el Museo del Vino completa un día perfecto.
48 horas al pie de la Cordillera
Si bien no alcanza para descubrir toda la riqueza cultural, en una estancia de dos días, se puede sumar una excursión a Luján de Cuyo recorriendo el corredor productivo o, Maipú donde hacer degustaciones, visitar bodegas boutique y deleitarse con paisajes entre viñedos. Cenar en un restaurante con vista a la Cordillera es el broche perfecto para despedirse de Mendoza.
72 horas de aventura en tierras sanmartinianas
Gastronomía de autor, cultura e historia mezclada con degustaciones de vinos quedaron atrás en los primeros dos días, ya que, si el viaje dura tres jornadas, es imposible dejar la Ciudad y la provincia sin animarse al turismo aventura. Por eso, hacer rafting en el río Mendoza, Trekking en Potrerillos o cabalgatas en la precordillera es un plan inolvidable, pero, si la preferencia es disfrutar del aire y el relajarse antes de volver a la rutina, una tarde de spa entre viñas en un entorno montañoso cierra el viaje de una manera especial para recargar energías para retomar la rutina.
Primicias Rurales
Fuente: Noticias Argentinas