“El Changómetro nos deja ver que la inflación afecta a todo tipo de productos: no solamente subieron los ingredientes para la cena, también subió el servicio de telefonía que usaron para organizarse y los alquileres de los inmuebles. Pasa lo mismo con los útiles escolares, con la obra social, con todo… Porque el problema no es de un sector u otro, el problema es que nuestro peso cada vez vale menos”, explica Miazzo.
En ese sentido, detalló que los trabajadores del sector privado registrado perdieron un poder de compra promedio del 17% y el sector público, 18%. Los más perjudicados fueron los no registrados, con un 34%. Con una inflación del 6% en abril, la inflación de los últimos 12 meses es del 58% y se espera al menos un 65% para todo el 2022. “Este número nos preocupa, no solo por ser alto, sino también porque se llegó a este punto con un tipo de cambio que viene detrás de la inflación”, detallaron desde FADA.