Buenos Aires, miércoles 17 noviembre (PR/25) — El Poder Ejecutivo envió al Congreso un proyecto de ley que propone un giro profundo en la relación entre el Estado y los contribuyentes.
La iniciativa actualiza el régimen penal y el procedimiento tributario e incorpora un régimen opcional de declaración jurada simplificada del Impuesto a las Ganancias, con un objetivo central: reducir la carga administrativa, incentivar el cumplimiento voluntario y focalizar la fiscalización en los casos realmente relevantes.
El proyecto, presentado el 3 de junio de 2025, se apoya en el llamado principio de inocencia fiscal, que busca dejar atrás la lógica de controles extensivos y presunción generalizada de evasión. Sin embargo, su éxito no depende solo del texto legal, sino de una transformación profunda de ARCA, el organismo recaudador.
Por qué se plantea un nuevo paradigma
El diagnóstico es contundente. El esquema actual, basado en controles masivos, no logró reducir la evasión. En el IVA, se evade más de un tercio del potencial recaudatorio y la informalidad laboral alcanza aproximadamente al 42% del empleo privado. Esta situación no solo debilita las cuentas públicas, sino que también genera desigualdad y distorsiona la competencia entre empresas.
Frente a este escenario, el proyecto propone cambiar el enfoque: facilitar el cumplimiento para quienes quieren pagar y concentrar los recursos del Estado en fiscalizar conductas graves y deliberadas.
Cambios clave en el régimen penal y tributario
Entre las principales modificaciones, se actualizan los umbrales a partir de los cuales una infracción tributaria se convierte en delito penal, evitando que la inflación transforme errores menores en causas judiciales. Además, se refuerza el incentivo al pago voluntario: si la deuda se cancela antes de una denuncia, el fisco puede abstenerse de iniciar una causa penal.
También se aclara que no debe haber denuncia cuando no existe intención dolosa, cuando hay diferencias interpretativas fundadas o cuando el contribuyente presentó su declaración antes de ser fiscalizado. En materia de prescripción, se busca mayor previsibilidad: si el Estado deja vencer el plazo para cobrar un impuesto, tampoco podrá continuar la acción penal.
Ganancias simplificada: menos trámites, más confianza
Uno de los puntos más novedosos es la declaración jurada simplificada de Ganancias, de adhesión voluntaria. Este esquema elimina la obligación de informar patrimonio y consumo y otorga efecto liberatorio al pago del impuesto, siempre que no se detecten “discrepancias significativas”.
Su funcionamiento, no obstante, dependerá de una reglamentación precisa y de que ARCA cuente con herramientas tecnológicas adecuadas para elaborar declaraciones confiables y detectar inconsistencias sin recurrir a presunciones automáticas.
¿Es un nuevo blanqueo?

No. El proyecto no incorpora un régimen de blanqueo ni modifica las reglas sustantivas del Impuesto a las Ganancias. Por lo tanto, no cambia de manera sustancial los incentivos para incorporar dólares al circuito formal. Se trata de un nuevo mecanismo de liquidación del impuesto, no de una amnistía fiscal.
El desafío decisivo: transformar ARCA
El cambio de enfoque exige que ARCA evolucione hacia un organismo más moderno, con mayor uso de tecnología, análisis de datos y fiscalización inteligente. Sin esa transformación, advierten los especialistas, la reforma corre el riesgo de no cumplir sus objetivos e incluso de profundizar los problemas actuales.
Tratamiento en el Congreso
El proyecto ya ingresó al Congreso y se espera que sea analizado en comisiones en las próximas semanas. Allí se debatirá no solo el alcance de las reformas, sino también los márgenes de mejora y los detalles que deberán definirse en la reglamentación.
En el PAL 110 se analiza en profundidad el alcance, las implicancias y los posibles ajustes del proyecto.
Primicias Rurales / IA
Fuente: IERAL. Fundación Mediterránea















