«Tú eres el Hijo de Dios»
«Tú eres el Hijo de Dios»

Este pasaje del Evangelio de Marcos en el que se habla de Jesús, se habla de la muchedumbre, del entusiasmo y del amor del Señor, que acabe con los espíritus impuros que, cuando lo veían, gritaban: ”¡Tú eres el Hijo de Dios!” y de cómo Jesús enérgicamente les ordena callarse. Sin embargo, ¡dicen la verdad!

«Extiende la mano»
«Extiende la mano»

Reflexión: Marcos en el inicio de su capítulo tercero nos presenta a Jesús que entra en la Sinagoga donde había un hombre con una mano paralizada y lo cura.

“ No tienen vino ”
“ No tienen vino ”

Reflexión: Es un buen día hoy para pedirle al Señor que nos haga fieles administradores de los carismas que nos ha dado, siempre atentos a lo que ocurre a nuestro alrededor, siempre disponibles, confiando, y todo para mayor gloria de Dios y salvación de los hermanos.

«Sígueme»
«Sígueme»

La respuesta es de perogrullo: Escuchaste una invitación hecha al corazón: Sígueme. – ¿Cómo resistirse al Maestro, al que nada se le oculta? ¿Al que tiene palabras perfectas, acabadas?