“ ¡Ay de ti! ”
“ ¡Ay de ti! ”

Reflexión: «Vivir desde dentro no significa vivir replegado sobre uno mismo y cerrado a la vida, sino hallar el espacio donde la persona pueda encontrarse con Dios, es necesario aprender a detenerse, hacer silencio y crear ese clima de recogimiento personal para reconstruir nuestro interior

“ Sed sagaces, sed sencillos ”
“ Sed sagaces, sed sencillos ”

Reflexión: En estos momentos de la historia, para ser un testigo, discípulo y apóstol de la Buena Nueva de Jesús, se necesita tener una presencia y lenguaje nuevo, inclusivo, tolerante y lleno de esperanza en un mundo tan diverso, plural y desesperanzado.
Jesús es nuestra referencia.

“ No he venido a abolir, sino a dar plenitud ”
“ No he venido a abolir, sino a dar plenitud ”

Reflexión: Esta moral que se fundamenta en la vida espiritual, esta moral que se enraíza en la amistad con Cristo, no es menos exigente que la que no pide más que nuestra obediencia a las reglas. Es más exigente aún, porque no espera de nosotros solamente tal gesto, el sacrificio de un placer o de una media hora: pide nuestro ser entero».

Él se levantó y lo siguió
Él se levantó y lo siguió

Reflexión: “Misericordia quiero y no sacrificios”, y por último con una consecuencia sobre su misión: “No he venido a llamar a los justos sino a los pecadores”. Jesús no ha venido a separar a nadie sino a curar y sanar las heridas de la humanidad.

“ Ánimo, hijo, tus pecados son perdonados ”
“ Ánimo, hijo, tus pecados son perdonados ”

Reflexión: «La pereza es un pecado feo, puede afectar a cada hombre: es vivir porque es gratis el oxígeno, el aire, es vivir siempre mirando a los otros que son más felices que yo, vivir en la tristeza, olvidar la alegría. Es un pecado que paraliza