«Mira, has quedado sano; no peques más, no sea que te ocurra algo peor»
Reflexión: Pero hay que responder a la pregunta: ¿quieres…? Y, si quieres, también puedes sanar otras soledades porque, como el paralítico, puedes ir hablando de Quien te dijo que tomaras la camilla. Puedes ir hablando de curación a otros.
«Si no veis signos y prodigios, no creéis».
Reflexión: Dice san Agustín que la oración es la fuerza del hombre y la debilidad de Dios. Y este pasaje lo expresa de manera elocuente. Y al mismo tiempo, la oración débil, pero confiada de la persona, es lo que muestra la fuerza de Dios. “Esta fue la segunda señal…”
«¿Qué mandamiento es el primero de todos?»
Lectura del santo evangelio según san Marcos 12, 28b-34:
Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Lucas (11,14-23): EN aquel tiempo, estaba Jesús echando un demonio que era mudo. Sucedió que, apenas salió el demonio, empezó a hablar el mudo. La multitud se quedó admirada, pero algunos de ellos dijeron: «Por arte de Belzebú, el...
«No creáis que he venido a abolir la Ley y los Profetas: no he venido a abolir, sino a dar plenitud.
Reflexión: El amor. Amar como él nos ha amado. Ese es el precepto. Esa es la norma. La única norma. La única ley. Todo lo demás es accesorio, secundario, creación nuestra, tradiciones hermosas, que valen en tanto en cuanto nos centran en el mandamiento principal.
«Señor, si mi hermano me ofende, ¿cuántas veces tengo que perdonarlo?
Reflexión: Porque solo con el perdón y la misericordia se construye la fraternidad. Todo lo que no esté en esa órbita rompe la fraternidad y crea rencor, división… Y nada de eso ayuda a construir el Reino. Pues, ¡hale!, a perdonar, que lo demás es perder el tiempo y abrir heridas inútiles.
A Jesús lo llevaron hasta un precipicio del monte sobre el que estaba edificado su pueblo, con intención de despeñarlo.
Reflexión: El Dios de Jesús es más grande que nuestras mentes. Y su amor es, hay que repetirlo y repetírnoslo, universal e incondicional. Por eso, solo cuando los cristianos somos capaces de amar a todos, sin excepciones de ningún tipo, es cuando anunciamos el Dios de Jesús y damos testimonio de él.
¡Hoy inicia marzo, el mes del gran San José!
“Todos pueden encontrar en San José -el hombre que pasa desapercibido, el hombre de la presencia diaria, discreta y oculta- un intercesor, un apoyo y una guía en tiempos de dificultad”, puntualizó el Papa Francisco.
“La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular.
Reflexión: En la familia de los hijos e hijas de Dios todos tienen cabida. Y los más alejados y marginados son los primeros en ser acogidos. La misericordia y la acogida es lo más importante.
“Si no escuchan a Moisés y a los profetas, no se convencerán ni aunque resucite un muerto”».
Reflexión: Jesús nos recuerda que los pobres han de ser los primeros. No hay forma de construir la fraternidad del Reino sino acogiendo a todos. La prueba de la autenticidad de la fraternidad es cuando se hace que los pobres sean los primeros
«No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber el cáliz que yo he de beber?».
Reflexión: Jesús da la vida para rescatarnos, para devolvernos la libertad, para abrirnos las puertas del Reino, para llevarnos a una nueva manera de vivir: en fraternidad y en servicio mutuo.
Vosotros, en cambio, no os dejéis llamar “rabbí”, porque uno solo es vuestro maestro y todos vosotros sois hermanos.
Reflexión: estamos llamados a vivir una fraternidad radical, sin límites. Ahí es donde se juega nuestra relación con Dios, nuestra salvación.
“La medida con que midiereis se os medirá a vosotros”
En el Evangelio Jesús nos invita a ser compasivos y misericordiosos como Dios.
“Si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos”
Evangelio del día Lectura del santo evangelio según san Mateo 5, 20-26 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos. Habéis oído que se dijo a los...